Este blog es un entrenamiento de escritora/periodista para mí. Intentaré transmitir mi pasión por el cine y la lectura. Espero que disfrutéis del ensayo y prometo ir afinando en el oficio.
Otro concepto importante, para lograr el empoderamiento, del que tanto hablo en este blog, es el de “el hogar inteligente”, aplicado en las viviendas particulares. Esta tecnología abre nuevas posibilidades para las personas con discapacidad; ya que pone en su mano la gestión de su vivienda, lo que contribuye enormemente a la mejora de su calidad de vida y a su autonomía personal.
En primer lugar, antes de realizar cualquier tipo de instalación es importante saber qué tecnología es necesaria implantar en un edificio. Por eso, es muy importante que un equipo profesional realice un concienzudo análisis de las posibilidades de accesibilidad en los distintos lugares de la casa. “Debemos tratar de conocer todos los productos de domótica que podrían sernos de ayuda en nuestra vida diaria”, explica Eva, interesada en esta tecnología para su hogar. “Un mecanismo que abre la puerta de la calle, la puerta del piso, sube y baja persianas; lo mismo hace con las cortinas, detecta movimientos, sube y baja los armarios de la cocina, tanto los altos, como la encimera, una alarma para mantenernos comunicadas, con sólo apretar un botón”, contó una ilusionada Eva. Además de la instalación de la domótica también estaría interesada en el uso de otros productos de apoyo: “Una grúa de techo que iría de la cama, al inodoro, y a la silla de baño, cubriría nuestras necesidades actuales y futuras que van encaminadas a poder hacer las trasferencias de la forma más sencilla posible”, dice Eva.
Con el deseo de mejorar su calidad de vida y lograr realizar con mayor seguridad las tareas cotidianas que de otra manera conllevan gran esfuerzo a una persona con discapacidad. Los principales problemas con los que muchas personas, que no grandes instituciones, se topan a la hora de iniciar la adaptación de sus viviendas particulares no son solo su elevado coste, sino también las trabas que muchos van encontrando por el camino y que pueden derrotar el espíritu más aguerrido. Por ejemplo el escaso compromiso por parte de algunas empresas constructoras, que no de todas, a la hora de ejecutar las obras necesarias para adaptar el nuevo hogar. La dificultad para conseguir ayudas y su lenta burocracia, las reticencias de las comunidades de vecinos para realizar estas instalaciones. La importancia de la domótica es una realidad palpable en la sociedad. Se precisa que los instaladores, constructores, proyectistas, ingenieros, arquitectos y diseñadores adquieran una rápida familiarización con las posibilidades de los nuevos dispositivos de ayuda a las personas con discapacidad.
La aplicación de la inteligencia artificial en la vida cotidiana de una persona con discapacidad tiene un gran potencial. El desarrollo de sistemas inteligentes facilitará la vida, no sólo para personas con discapacidad o ancianos, sino a todo el conjunto de la sociedad. La necesidad de inventar, de crear, de adaptarse a las nuevas realidades, tarde o temprano se convertirá en una responsabilidad de todos. George Bernard Shaw, el premio Nobel de literatura, dijo: “El hombre razonable se adapta al mundo; el irrazonable intenta adaptar el mundo a sí mismo. Así pues, el progreso depende del irrazonable”. Irracionales, locos, excéntricos…
Las personas, por el hecho de ser personas, tenemos derecho a contar con todas las herramientas que nos ayuden a lograr una autodeterminación como individuos, a movernos por un entorno accesible, y a contar con los apoyos necesarios para desarrollar una vida independiente. El vertiginoso avance tecnológico experimentado en los últimos años está contribuyendo eficazmente al desarrollo de la domótica y las tecnologías de apoyo, una solución de futuro que ya comienza a estar presente en nuestras vidas.
Etxegoki es un edificio de apartamentos con apoyo para personas con discapacidad física, gestionado por la Federación Coordinadora de Personas con Discapacidad Física y Orgánica de Bizkaia (Fekoor), una entidad no lucrativa declarada de 'utilidad pública' por el Gobierno Vasco. Estos apartamentos abrieron sus puertas en 2011 y cinco años después fueron reconocidos con el galardón ‘Quality Innovation Award’ en la categoría de Innovación Social. Para Luis Melús, coordinador de Etxegoki: “Llevar a cabo este proyecto, más que complicado, ha resultado ser un reto ya que no hay en España un sistema como el de Etxegoki, basado en el fomento de la vida independiente”. Etxegoki aúna innovación social y tecnología de apoyo para promocionar al máximo la autonomía de las personas. Para conseguir este objetivo, Luis matiza: “Contamos con tecnología innovadora, flexible y adaptada a todas las capacidades”, lo que permite el control de todo el edificio de manera autónoma por parte de los usuarios.
Se puede aplicar algún nivel de automatización o automatismo a varios elementos de la casa; pudiendo ser desde un simple temporizador para encender y apagar una luz o cualquier aparato a una hora determinada, hasta los más complejos sistemas capaces de interactuar con cualquier elemento eléctrico de la casa. En definitiva, la domótica busca la integración de todos los aparatos del hogar, de forma que todo funcione en perfecta armonía, con la máxima utilidad y con la mínima intervención por parte del usuario con discapacidad o movilidad reducida.
Laura San Miguel, es una de las personas que vive en estos apartamentos. Algo llamativo en ella es que tiene una especie de pulsador amarillo, sujeto con un velcro al reposabrazos de su silla eléctrica: “Este botón amarillo lo llevo incorporado a la silla, lo ideó Julen -el anterior encargado de mantenimiento en Etxegoki- con el que puedo abrir la puerta de recepción, cuando esta ya se cierra”. Etxegoki cuenta con elementos como ventanas, puertas, estores, luces, mesas, encimeras, camas e incluso las grúas de techo completamente domotizados, “puedes controlar todos estos mecanismos a través de un único mando, pulsando solo una tecla”, cuenta Luis. Para Laura, respecto a la domótica, algo de “vital utilidad”, es el poder contar con alarmas para avisar al equipo profesional: “Lo que más valoro, es poder contar con ayuda para las cosas importantes como ir al baño, asearme, acostarme o levantarme de la cama”. Los apoyos son imprescindibles todos los días del año. Para ello combinan un equipo profesional con las ayuda técnicas instaladas: “Con el único fin de que las personas que allí viven, puedan decidir sobre sus propias vida”.
Poder de decisión sobre su propia existencia y libre desarrollo de la personalidad son los principales objetivos que cualquier ser humano con discapacidad o no persigue. Contacto Etxegoki:
La autonomía personal es de vital importancia para el centro de capacitación e integración ‘Arbolarte’, gestionado por FEKOOR.
“Lo que hacemos en Arbolarte es entrenar a las personas para poder llevar a cabo una vida independiente”, por ello trabajan con la persona en todas sus dimensiones e intentan que la persona se empodere y que desarrolle su capacidad de toma de decisiones, respetar sus derechos, también cumplir con sus obligaciones. “Por lo tanto Arbolarte sería como un centro de entrenamiento, dirigido a la capacitación y a la autonomía de la persona”, explica Ana Elorz Sancho, coordinadora de Arbolarte. Para ello trabajan desde tres bloques fundamentales; “el pilar persona, el pilar entorno y el pilar apoyos”. Ana explica cuál es la importancia del primer pilar, el que respecta a la persona; “entendemos que la persona necesita tener a su alcance todas las herramientas que le permitan lograr el empoderamiento y la capacitación necesarias para lograr esa autodeterminación”. A continuación cuenta el objetivo del pilar entorno; “la accesibilidad universal, igualdad de oportunidades, derecho para todas las personas y también todo lo referente a la tecnología de apoyo y al control del entorno”. Todos necesitamos poder movernos y funcionar en un entorno accesible y utilizando los productos de apoyo necesarios para lograrlo. Por último habla del pilar apoyos “hay determinados momentos de nuestra vida en los que esos apoyos son más intensos; como puede ser la infancia o la tercera edad”. Ana entiende que, en ocasiones, por nuestras características especiales podamos necesitar más ayuda; “y estos apoyos pueden ser tanto de personas, como de profesionales o servicios”. “Y es necesario que toda esa oferta de servicios sea económica y accesibles para todas las personas”, concluye Ana.
El objetivo principal de Arbolarte es la autodeterminación y capacitación de las personas con discapacidad física, con el fin de que mejoren tanto la gestión de sus propias vidas como la interacción con su entorno.
“Lo que nosotros aquí trabajamos, a nivel de tecnología de apoyo, sería todo lo referente a la movilidad, todos necesitamos movernos en el medio urbano”, cuenta Ana. Algo de vital importancia para que las personas puedan tener una inclusión social; “por eso trabajamos mucho el entrenamiento en el uso de la silla a motor, el uso de todo tipo de transportes públicos, todo lo que el usuario necesite para moverse”. También se trabajan las nuevas tecnologías de acceso a las redes sociales y a la comunicación. “Desde el ordenador y los dispositivos móviles, trabajamos con todo lo que permita al usuario mantenerse actualizado y que le ayude a gestionar mejor sus momentos de ocio”, añade Ana. También trabajan con tecnología específica dedicada a la comunicación con algunas personas con dificultades en el habla. En Arbolarte la tecnología de apoyo es básica pero eso no es lo único que ofrece. Hablar de Arbolarte es hablar de personas, personas que luchan por lograr un mismo objetivo: la autonomía y el bienestar. Dos conceptos que a veces van de la mano y otras no. Contacto FEKOOR:
